domingo, 18 de octubre de 2015

El Niño está ya entre nosotros y su impacto oscilará entre ser fuerte y extraordinario



Hace tres semanas Abraham Levy pidió en Ica esperar unos días para ver cuál sería la intensidad de este fenómeno climático. Ahora se confirma que la gran masa de agua caliente que nuestro litoral resistía ha llegado.

Por: Guillermo Román-Flores (*)

Hace algunos días la Junta de usuarios de aguas subterráneas del vale de Ica invitó a Abraham Levy a dar una conferencia sobre los impactos posibles del fenómeno “El Niño” en Ica. La cita se dio en el local del Gobierno Regional y fue el propio gobernador Fernando Cilloniz quien indicó que se están tomando medidas para afrontar el fenómeno natural, tanto en Chincha, Pisco como en Ica. “Debemos mencionar que el interés del gobierno central está en las regiones del norte, y los recursos que nos han asignado como gobierno central son reducidos.” “Nosotros como autoridades hemos iniciado un plan de trabajo que incluye a los alcaldes para tomar las precauciones del caso y que el Río esta vez no nos gane, pero debo solicitarle a los agricultores y en especial a los exportadores que por favor utilicen toda el agua de avenida que puedan. Tenemos que devolverle su vocación agrícola al valle y dejar de construir urbanizaciones en las zonas que deberían ser regadas por el río. La expansión urbana tiene otro camino” señaló Cilloniz.


A su turno el destacado “Hombre del tiempo” expuso imágenes satelitales que daban referencia exacta del proceso que se venía desarrollando en el océano Pacífico con las temperaturas altas en el mar. “Lo que ha venido pasando entre los meses de junio y agosto es muy curioso y no se tiene  registros anteriores que puedan acercarnos a las características de este Niño. Cada fenómeno tiene sus características especiales, pero este es muy especial. Lo que viene ocurriendo es que la onda Kelvin (gran masa de agua marina con alta temperatura)  que debió llegar e instalarse frente a nuestras costas ha encontrado una especie de bache que no la ha dejado entrar a plenitud a nuestras costas. Sabremos en las próximas semanas si esta Onda Kelvin logra instalarse, mi pronóstico es que así sucederá, y en ese momento podremos tener más certezas de la magnitud que este fenómeno tendrá durante los próximos meses, sobre todo durante el verano que es la estación que podría acarrear más problemas con las precipitaciones que se dan sobre todo en el norte de nuestra país. Pero es necesario que todos sepamos que actualmente estamos en pleno fenómeno de El Niño. Sentenció Levy.

Ese tiempo ha transcurrido y este fin de semana en sus cuentas de redes sociales se hizo el anuncio: “El Niño en el Pacífico es enorme. Su impacto en la costa que había atenuado en invierno, más no desaparecido, está regresando con vigor. No hay nada contradictorio. Me temo que las probabilidades de llegar al verano con algo intenso son altas.”



Sin embargo los registros comparativos de temperaturas en el mar para nuestras costas muestran niveles menores a los registrados durante el niño del 97, eso no confirmaría nada, en palabras del propio Levy, este es un niño especial, debemos tomar las precauciones del caso y para Ica que tiene una alerta de deslizamientos desde las quebradas de Cansas y Yauca se tienen registros históricos que coincidentemente repiten patrones vinculados al fenómeno del Niño. Mi principal exhortación tanto a autoridades cómo a todos los ciudadanos es que deberían reforzar y cuidar su infraestructura hídrica. Compuertas, canales y todo aquello que conforma nuestro sistema de abastecimiento de agua. Sería muy triste no aprender del pasado y en esta época de vacas flacas será difícil que el gobierno invierta como se hizo en los 90. Finalizó el especialista.

(*) Director Ejecutivo de TCC


lunes, 14 de septiembre de 2015

FERVOR, el espíritu de nuestras fiestas


Fotografía: Julie Baudin

Por: Guillermo Román-Flóres (*)

El fervor es aquello que nos empuja a vivir una experiencia única cuando se trata de agradecer, rendir tributo y buscar esa esencia tanto espiritual como de identidad que nos hace lo que somos. No es un tema del que pretendamos teorizar ni mucho menos describir, sólo queremos interpretar las imágenes que estas últimas ediciones del Corpus Christy y el Inti Raymi nos dejaron. Y es que aunque no exista una relación “formal” entre una y otra celebración quienes estudian el origen de estas fiestas saben que la una es el inicio de la otra desde tiempos de los incas y es que es de ellos que recogemos nuestra ritualidad y dedicación en este tiempo para celebrar.

José Huaman es un documentalista enamorado de los ritos y las fiestas del Perú, no en vano dedicó tres años de su vida a formar parte del proyecto documental que devino en dos elaboradas y completas publicaciones “El calendario de fiestas del Perú” y “Perú en tiempos de fiesta”. Al consultarle sobre el tema del fervor me dijo que es imposible entender la esencia del Perú sin el profundo arraigo que tenemos de nuestra religiosidad. “Si bien la forma de vivir esta religiosidad fue asumida  y adaptada por la evangelización colonial, esta tiene su raíz inicial en los mitos y ritos del Perú antiguo. Los hombres andinos desde que se levantan por la mañana tienen una conexión con sus dioses, son agradecidos y están en un diálogo constante con ellos, los hechos de la naturaleza son mensajes codificados que nosotros los peruanos sabemos leer a la perfección y es así como nacen los cimientos del fervor actualmente.

Las fiestas al ser organizadas por mayordomos o carguyoc ejemplifican un rasgo distintivo de la organización social andina, la de la reciprocidad en la búsqueda de la pertenencia al grupo y la legitimidad o reconocimiento en el seno de una comunidad. Uno se luce y hace sacrificios para poder celebrar en comunión con sus vecinos y ese es un emblema que ha trascendido a lo largo del tiempo. De esta forma se crean las identidades para el colectivo social concluye Huamán.

Las nuevas generaciones actualmente han abrazado con el mismo fervor y devoción el encargo de estas fiestas, danzarines en todas las esquinas esperando la fiesta del sol nos recuerdan que somos un pueblo que baila, que expresa con música y movimiento lo que el espíritu colectivo agradece. Es una muestra tangible de que nuestras tradiciones están más vivas que nunca, pero algo ha empezado a cambiar.

Las redes sociales nos han permitido en cuestión de segundos estar conectados con la sensibilidad de nuestros amigos, familiares y vecinos y con todos ellos en tiempo real y sin las distancias de la lejanía física. También podemos ver y oír lo que piensan y sienten en este continuo devenir de las fiestas. Y algo que hemos podido percibir en los últimos tiempos es un respeto por volver a la esencia religiosa, al respeto del culto y de las formas espirituales, antes que el desenfreno de una fiesta pagana que está basada en el alcohol. Y eso es digno de destacar.

Otro aspecto que vemos con agrado es el de no dejar que estas auténticas expresiones de nuestra identidad se comercialicen. No tengo nada en contra de las empresas que apuestan por organizar y ser parte de las fiestas como una forma de agradecer por sus logros empresariales, pero buscar un rédito publicitario o de exposición de marca en medio de los ritos religiosos cómo hemos podido observar a través de la redes sociales en la fiesta de la Virgen del Carmen en Paucartambo es creo una mala estrategia. No creo que a la larga genere la recordación necesaria. Todo lo contrario, el público siente un aprovechamiento descarado y casi sacrílego en muchas de las expresiones que hemos podido recoger, y esto debería llamar profundamente a la reflexión a quienes están detrás de estas iniciativas.

El fervor obtiene nuevas formas que se reinventan y nos dejan ver claramente como el paso del tiempo genera nuestra identidad, aquella que recogimos de nuestros padres como legado y aquella que nosotros venimos construyendo en la interpretación del sentido espiritual de las nuevas generaciones. Paradójicamente  custodiamos con fe un legado ancestral pero lo reacomodamos a las sensibilidades de estos tiempos nuevos.


(*) Director Ejecutivo de Taller Creativo Consultores. Artículo publicado en la edición 51 de la revista Cusco Social

martes, 25 de agosto de 2015

La importancia de involucrar a nuestros colaboradores en la estrategia digital




Cuando las organizaciones empiezan a confiar en la capacidad de sus colaboradores para representar a la marca, cosas buenas pasan. Pero el primer paso lo tiene que dar la empresa.

Por: Luis Cornejo Peralta (*)

Muchas veces las organizaciones se encuentran en situaciones en que no les son suficientes los canales oficiales o gremiales. Los directivos comienzan a darse cuenta que no tienen un apoyo comprometido que genere impactos positivos hacia la marca. Erróneamente, muchos buscan este soporte externamente, intensificando su estrategia de relaciones públicas, de presencia en medios de comunicación o publicitaria, pero siempre ofreciendo a un solo interlocutor para soportar el mensaje: la empresa misma.

Entonces, pareciera que no hay nadie más que pueda dar fe de las versiones brindadas por la organización, nadie más que la soporta con su opinión, nadie que la respalda individualmente. No nos damos cuenta que cada organización cuenta con tantos embajadores de su marca como colaboradores tiene. Tampoco vemos claramente que cada uno de ellos, desde las distintas especialidades y roles que desempeñan pueden ser defensores y promotores de nuestra posición, no solo en tiempos difíciles sino, sobre todo, en el acontecer diario de la marca.

Las redes sociales y demás plataformas digitales nos otorgan a todos un sentido de voz pública nunca antes conocido, y la capacidad de poder influir positiva o negativamente sobre productos, marcas, organizaciones, situaciones y personas.

Pueden existir muchas formas de conseguir el apoyo de nuestros colaboradores para fines específicos, donde la organización necesita consolidar una posición y fortalecer su versión sobre un hecho en particular; y de poder construir una comunidad interna que funcione frecuente y eficientemente que pueda dar cara por la organización si así se requiere.


Aquí propongo cinco acciones para empezar a construir estos grupos internos de soporte:

  1. Verifique las políticas de comunicación y el acceso que tienen los empleados a las redes sociales y medios digitales: Si sus trabajadores no pueden acceder a sus cuentas de Facebook, Twitter o Instagram, de nada servirá su voluntad para ayudar a la empresa. Deles el acceso y sea específico sobre los parámetros de su uso, la creación de una política de uso de redes sociales es una buena opción.
  2. Actualice sus canales internos y externos: Si la organización no acostumbra compartir información con sus empleados o lo hace tarde o luego de que suceden los hechos, esa desidia comunicativa será recíproca en su fuerza laboral. De igual modo externamente, los canales deben estar actualizados. Sea constante.
  3. Produzca contenido relevante: Sus colaboradores, casi siempre, estarán dispuestos a ayudar a su organización si eso se requiere de ellos. Sin embargo, la empresa es la que debe proporcionar contenidos valiosos (videos, notas de prensa, fotografías, etc.) que puedan ser difundidos por los empleados. De esta manera también podrá orientar mejor el tono, estilo y tiempo de la comunicación, potenciando los resultados de la intervención de los colaboradores.
  4. Siempre provea una versión oficial: Aun cuando la empresa pueda brindar contenidos valiosos que compartir y discutir, se debe asegurar la existencia de una versión oficial en cada caso que, a modo de resumen, permita conocer claramente la posición formal de la organización. Así también se evita la dispersión en el mensaje.
  5.  El momento es ahora: En las redes sociales, así como en la mayoría de espacios digitales, el tiempo es un elemento muy valioso. No lo pierda en procesos de aprobación engorrosos; reduzca los pasos, acelere las revisiones, haga lo que sea necesario para que las aprobaciones no retrasen o bloqueen la oportunidad de la comunicación. La reputación de su empresa se lo agradecerá y la voluntad de sus colaboradores también.

Las áreas de comunicación interna y de recursos humanos cumplirán un rol fundamental en lograr identificar a aquellos colaboradores que puedan ser los impulsores internos al momento de motivar al resto del equipo a involucrarse en las conversaciones y discusiones sobre cuestiones relacionadas a la organización y a la marca, cuya reputación, en cierto modo, también comparten.    


(*) Director de Taller Creativo Consultores

lunes, 17 de agosto de 2015

Con el desarrollo preventivo ganamos todos



Cuando en una comunidad se unen las potencialidades con una visión de futuro sostenible se puede aspirar a lograr grandes cosas.

Por: Víctor Aubert Rothgiesser (*)

Muchas veces la gestión social de las comunidades, relacionadas con un proyecto u operación, se inician tiempo después de que se inició el relacionamiento real; y habitualmente cuando se llega a situaciones de potencial coacción por alguna de las partes, cuando es necesario “negociar”. Y muchas veces, también, al llegar a este punto, ya se crearon problemas de confianza y credibilidad entre las partes, los cuales complican mucho el relacionamiento empresa – comunidad e influyen negativamente en el desarrollo de la convivencia.

Para evitar los problemas de confianza y credibilidad, y para buscar un compromiso entre las partes, se está utilizando hoy el concepto de “desarrollo preventivo”, que ha sido definido por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) como “una estrategia para transformar los conflictos vinculados al uso de recursos naturales en oportunidades para el desarrollo mediante el impulso de herramientas que contribuirán al fortalecimiento de las capacidades de las instituciones, actores y aliados participantes. Este enfoque comprende al territorio como el escenario para el desarrollo, donde viven personas que comparten historia, cultura, aspiraciones socio-políticas, un ambiente con recursos naturales y ecosistemas, medios productivos, económicos y de infraestructura que requieren ser encadenados para potenciar su desarrollo, constituyéndose en una mirada integral que conjuga todas esas variables”.

En un escenario de “desarrollo preventivo”, la empresa inicia sus labores de gestión social en paralelo con el inicio del proyecto, con el enfoque de apalancar las potencialidades de la comunidad de forma colaborativa. Esta interacción inicial sumada al desarrollo y puesta en marcha de planes conjuntos entre comunidad y empresa permiten crear lazos de confianza y credibilidad mutua, ayudando también a la construcción de canales de comunicación efectiva, eficiente y económica entre las partes. En este entorno, es altamente probable que se consiga un ambiente positivo de convivencia que se mantenga estable durante el desarrollo de la operación de la empresa, que los conflictos entre las partes se minimicen y que la solución a los mismos se simplifique mucho.

Con el enfoque de “desarrollo preventivo” ganan todos: la empresa, que puede operar en un ambiente de convivencia positiva; que puede desarrollar canales de comunicación directos y relevantes; y que puede obtener una mayor rentabilidad social de sus inversiones en responsabilidad social. Las comunidades, que consiguen una mejora real en sus condiciones de vida (gracias a la inversión en el desarrollo de sus capacidades); que pueden percibir directamente, y desde un inicio, beneficios relevantes en sus localidades; y que pueden convivir con una operación extractiva en una situación confianza.  Y, las autoridades, que pueden contar con socios estratégicos para impulsar el verdadero desarrollo de sus localidades, con una visión conjunta y en entornos de paz y compromiso social.

(*) Director de Taller Creativo Consultores